‘¡Hagámoslo otra vez!’, de Mika

Editorial: Odaiba.

Guion: Mika.

Dibujo: Mika.

Páginas: 200.

Precio: 8 euros.

Presentación: Rústica con solapas.

Publicación: Febrero 2023.

Hay un reto intrigante en ¡Hagámoslo otra vez!, y es que Mika se acerca al amor y sobre todo al sexo con protagonistas que presentan notables diferencias que la sociedad se empeña en señalar a veces casi como circunstancias incapacitantes. Hablamos de la edad y la altura, dos circunstancias que siempre destacan de cara a la sociedad, pero que también afecta a la relación entre sus dos componentes. ¿Quién no ha mirado con curiosidad o incluso con recelo a parejas sobre las que hay una notable separación de años, tantos como que para sus mundos parezcan diferentes… y más aún si es la mujer quien tiene más edad? ¿A quién no le ha llamado la atención una pareja en la que él es mucho más alto que ella? Ahí pone Mika el foco de las dos historias que conforman este volumen, uno que apuesta por el picante y por el romanticismo como fuerzas en equilibrio, constantes de dos parejas que se quieren y se desean a la vez, que se acaban de conocer y que pelean por saber si tienen el futuro en común con el que sueñan. Las historias, en realidad, juegan con arquetipos y algunos lugares comunes, pero siendo tan explícitas visualmente en sus escenas de sexo y con las características ya comentadas para dar forma a sus ideas de base es fácil encontrar el punto de interés que tienen.

Si hay algo curioso en los planteamientos de Mika es la facilidad que tiene para entender problemas en vidas aparentemente perfectas. Encaja bien los mundos de sus hombres y sus mujeres para que encuentren ese punto en el que se complementan, sean las del muchacho recién llegado a la edad adulta que se enamora de la treintañera que busca curarse de un amor fallido o la diseñadora que se enamora de su modelo para pelearse contra la sociedad que señala su cara aniñada como algo si no negativo al menos sí extraño. Y desde bases que pueden ser perfectamente creíbles, monta historias de amor y sexo que también tienen esa cualidad. Parece que Mika apenas tiene que esforzarse porque el relato fluye siempre con mucha naturalidad. Sin mayor trascendencia en realidad que la de ser el reflejo de unas vidas concretas, sin moralizar, sin tratar de que los dos protagonistas de turno nos tengan que caer igual de bien o sin que tengamos que aceptar todas sus decisiones o comportamientos, simplemente poniéndose en el papel de cronista que entiende la pasión de cada instante. Y ahí Mika tiene una enorme sensación de comodidad y muestra un férreo control sobre lo que nos cuenta, sin necesidad de abocarnos a conclusiones que tengan matices socialmente aceptados, por muy aceptado que podamos tener el final al que vamos a llegar en cada uno de los relatos.

Hemos hablado de la cualidad de Mika para entrar en un mundo de aparente perfección, y en esa labor su estilo visual es determinante, un evidente punto a favor del manga. Sus protagonistas son bellos, ellas y ellos, no podría ser de otra manera para entender hacía dónde nos quieren llevar sus historias, y tiene toda la lógica del mundo una vez que el sexo explícito tiene el papel evidente de calentar a los lectores y añadir esa pasión más o menos latente que hay en sus dos relatos. El de Mika es un mundo de revista, de anuncio y de éxito y no siente ningún rubor en mostrarlo de esa manera, algo que, todo hay que decirlo, encaja como un guante en los escenarios que plantea. Hay mucho primer plano cuando el centro del relato está en lo emocional y mucho plano general cuando los protagonistas se quitan la ropa. El detalle se vuelca en ellos, en los actores principales, sin necesidad de enseñar más de lo necesario, y mediante esas artimañas ¡Hagámoslo otra vez! cumple con todo lo que promete, amor, sexo, problemas emocionales coherentes con la vida moderna y enredos a dos bandas con el fin de mostrar que se puede lograr una relación estable y hermosa incluso cuando no se cumple con ciertas convenciones sociales, pero todo mostrado desde un punto de vista lúdico y nada moralizante.

Las historias de este libro se publicaron originalmente en la revista Renai Tengoku entre julio de 2018 y marzo de 2019.

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